7 de noviembre de 2010

Consejos vendo...

Hoy, voy a saltarme la regla de oro que me impuse hace ya más de año y medio, cuando creé este blog. Entonces me negué a escribir en él sobre cualquier tema relacionado con política ni crítica social, pero hoy, no puedo. Y claro que me cuesta hacerlo, pero parece ser que últimamente necesito desahogarme por aquí, y es que después de leer la última entrada del blog de Sara me he encendido (más).

De nuevo cambio de tercio, a pesar de que no me gusta demasiado meterme en estos temas y menos en este caso que -egoístamente hablando- a mí ni me va ni me viene. Sí, y es que hasta ahora todo este asunto del papa me resbalaba bastante a mí también. Que conste que no tengo nada en contra del catolicismo, ni siquiera descarto ser yo también algo parecido; además, en este caso, se toca más parte de política que de religión. Lo que no puedo es ver 30 minutos de telediario en que 27 son una crónica general de la preparación de la visita del santo padre (con minúsculas) y después, si eso, te informan de que han muerto 60 personas en Cuba porque un avión se ha estrellado. No, es que no puedo.

Yo a ese señor le quitaba la túnica y le daba un jersey de lana (con bolas, si puede ser) y una boina; le quitaba el Vaticano y le daba una apartamento de 50 metros cuadrados, con camilla y brasero; le quitaba el papamóvil y le daba un bonobús; le quitaba los 30 millones que se gasta cada finde que decide salir de vacaciones y le daba los 700€ (¿o estoy exagerando? No estoy segura) de pensión que tiene cada abuelo; y, por último, le quitaba al señor -si es que solo hay uno, que lo dudo- que le pone la túnica limpia todas las mañanas encima de la cama y le metía a los hijos en casa. Y después de todo eso le daría unas cuantas palmaditas en la espalda y le preguntaría de nuevo qué opina sobre los condones. Desgraciadamente no pinto nada en ningún sitio, así que jamás podré hacer ninguna de estas cosas.

Lo malo de todo esto es que cuanto más arriba se encuentran más les cuesta ver a quien realmente vive con los valores que ellos defienden de boquilla; eso lo llevan haciendo mucho tiempo y con cosas como las de este fin de semana sólo suben más y más. Y ya no hablo solamente de papas y catolicismos.

s.

(...y para mí no tengo)

1 comentario:

sarasánchezgo dijo...

Que la vida me dé paciencia porque como me dé fuerzas me lío a hostias... (anda, mira como el Papa)
Malditos desgraciados, de verdad, aquí la gente luchando por vivir decentemente y este paseándose como si nada, con el oro. Si es que no sé como no le da vergüenza, bueno, en realidad, no sé como tampoco le da vergüenza a la gente que va allí a besarle la mano, y ya que está, a besarle el culo.
¡JUM!